En los años 60 reinaba una
marcada segregación racial, mucho se habla acerca del famoso apartheid
en Sudáfrica, sin embargo en el resto del mundo el mismo fenómeno se extendía,
tal vez no de forma tan radical y violenta, pero si similar en sus
puntos esenciales.
The help narra la historia de
Eugenia Skeeter, una joven que regresa a su ciudad tras culminar sus estudios
con la firme intención de convertirse en escritora. A simple vista parece una
chica más de la clase alta en Mississippi, pero en el fondo Eugenia es muy
diferente a sus amigas y a la mayoría de gente blanca que habita en la ciudad,
ella nunca ha entendido por qué las mujeres negras están obligadas a servirle a
las blancas, a cuidar y criar hijos que después se convertirán en sus jefes. A
partir de esta inconformidad empieza a buscar la forma de cambiar esta realidad,
consciente del riesgo al que conlleva su decisión. Junto con las criadas negras
que conoce, emprende un viaje contra la mentira, la humillación, el prejuicio y
la tradición.
Guión basado en la novela de
Kathryn Stockett, cuyo argumento está impecablemente cargado de emotividad, sin
convertirse en un melodrama sentimental sobre el racismo. Las dos criadas negras
que protagonizan la historia (Viola Davis y Octavia Spencer) nos regalan unas
perfectas actuaciones que logran trascender más allá del problema de opresión,
se trata más de una historia de dignidad y del respeto a uno mismo, en donde
nada se pierde si se mantiene la cabeza en alto.
El ritmo de la película es
correcto y logra entretener, manteniendo un adecuado equilibrio entre el drama y
la comedia, un guión repleto de diálogos sencillos y concretos... nada
sobra.
Un gran punto a favor de The
Help es su originalidad al tratar un tema que tantas veces ha sido explotado con
anterioridad, y llevado al máximo del sentimentalismo o sensacionalismo. Después
de ver el film realmente se presenta la duda de si acabamos de ver o no una
película sobre el racismo, porque todo queda disminuido o aumentado a una
historia humana, que puede ser adaptada a cualquier caso de injusticia
social.
El final es grandioso, no es
feliz como nos tienen acostumbrados las típicas comedias, ni tampoco
es dramático o triste. Simplemente es un avance de la historia, un "todo va
bien" y a la vez un "nada ha cambiado", y sin embargo todos sabemos que mucho
cambió, aunque no en la sociedad, si en la vida misma de sus protagonistas, en
su manera de afrontar el miedo y de resistir.
Calificación: 8/10
Me gusto muchísimo la película. De lo mejor de un gran 2011 de cine.
ResponderEliminarSi David, estoy de acuerdo contigo... a pesar de su sencillez y frescura es un muy buen producto!!
ResponderEliminarSaludos y abrazos
Me gusto mucho esta película, me rei bastante con lo de la tarta y me la historia de la mujer blanca que no para de tener abortos la amistad y el apoyo que surge con su criada es otro punto que me gusto esta 100% recomendada.
ResponderEliminarun saludo, me gusta este blog me veras mas veces por aqui.
Tienes razón Javier, la película tiene muchos detalles que aunque sencillos, la hacen grandiosa.
ResponderEliminarSaludos y gracias por tu visita :)
Me quedo con esto que dijiste al final
ResponderEliminarEl final es grandioso, no es feliz como nos tienen acostumbrados las típicas comedias, ni tampoco es dramático o triste. Simplemente es un avance de la historia, un "todo va bien" y a la vez un "nada ha cambiado", y sin embargo todos sabemos que mucho cambió, aunque no en la sociedad, si en la vida misma de sus protagonistas, en su manera de afrontar el miedo y de resistir.
es exactamente eso lo que me quito el aliento cuando vi esta pelicula...fue inevitable sentir tantas emociones cuando proyectaron el film en cines, realmente esta es una de las ultimas peliculas buenas que vi en cines
Claro que si Camila, es una gran película que al final nos deja una sonrisa en el rostro!
ResponderEliminarSaludos :)